¿ES TÓXICO EL DIÓXIDO DE CLORO?
Toxicidad del dióxido de cloro
Antes de hablar de toxicidad hay que conocer los principios.
La toxicidad de una sustancia se define por:
- La cantidad que la hace tóxica
- El lugar donde afecta
- La concentración
- La duración de la exposición
El primer principio básico de la toxicología :”La cantidad hace el veneno” (Paracelso) esta precisamente es la razón por que la medicina alopática tiene en su símbolo a la serpiente enroscada en un bastón ya que prácticamente todas las substancias que utilizan en la medicina convencional son tóxicos.
La toxicología es el estudio de los efectos adversos asociados a la
exposición a agentes físicos o sustancias químicas e investiga sobre el mecanismo de acción de los agentes tóxicos facilitando la elaboración de medicamentos de la medicina convencional.
Según la base de datos de Toxicología alemana (Gestis) se define la toxicidad LD50 en 292 mg por kilo vivo durante 14 Días (!) , que significa que una persona de 50kg debe tomar 15.000 mg y una persona grande como yo de 100kg 30.000 mg (!) algo absolutamente imposible, ya que significaría que en mi caso me debería beber 10 Litros de concentrado... cosa imposible pues es una sustancia emética.
Según la base de datos de Toxicología alemana (Gestis) se define la toxicidad LD50 en 292 mg por kilo vivo durante 14 Días (!) , que significa que una persona de 50kg debe tomar 15.000 mg y una persona grande como yo de 100kg 30.000 mg (!) algo absolutamente imposible, ya que significaría que en mi caso me debería beber 10 Litros de concentrado... cosa imposible pues es una sustancia emética.
Al mismo tiempo hay que remarcar que las ratas de laboratorio no pueden vomitar y por lo tanto estos datos no son aceptables en términos científicos para humanos.
La toxicidad del Dióxido de Cloro
Podemos leer en innumerables sitios que el dióxido de cloro es tóxico y esto es cierto si hablamos en términos pulmonares.¿Qué significa esto? Un ejemplo: podemos beber agua pero no podemos respirar agua ya que no somos peces y nos ahogaríamos. No debemos inhalar el dióxido de cloro, ya que ocuparía el espacio alveolar y nos podría causar problemas respiratorios a largo plazo.
A corto plazo nos puede causar irritación y tos. No existen casos documentados de muerte en la ciencia conocida por la ingestión de una solución acuosa de dióxido de cloro.
La concentración para tratamientos descritos en este libro, no supera los 0,0030 g habitualmente.
Si se habla del dióxido como blanqueador se está comparando una solución 59.600 veces más concentrada. Además, está compuesto de una química mucho más fuerte en su mayoría que es el clorato. Hay que reconocer que estas afirmaciones falsas, quedan bien en los medios de comunicación sensacionalistas, para crear polémica, sin embargo esas aplicaciones están muy lejos de la realidad.
El Dióxido de Cloro (CDS) no es lejía
Se puede leer en Internet especialmente por parte de los detractores de los tratamientos de ClO2 en sus artículos de desinformación que el dióxido de cloro es un gas tóxico y un oxidante muy fuerte, utilizado para el blanqueo de textiles y papel.
Ciertamente existe documentación genérica que así lo indica. Sin embargo, cuando la miramos en detalle, podemos observar que la cantidad que se utiliza para el blanqueo de papel no está en relación con lo que se utiliza para los tratamientos. Para el blanqueo de papel y de seda se utiliza el dióxido de cloro de manera muy concentrada en conjunción con el metanol.
La concentración utilizada es de: 11 g por litro (!) En conjunto con 138 g por litro (¡total de 149 gramos!) de clorato sódico (NaClO3) que es un oxidante mucho más agresivo y nocivo.
Fuente: Georgia Institute of Technology
El hecho de que se usa como desinfectante es del todo irrelevante, ya que el alcohol también lo es (y aún así lo bebemos :) por otro lado, medicamentos legales como la Warfarina son usados como raticida también.
Hechos y datos
1. El dióxido cloro es un gas disuelto en agua y no es una toxina que se acumula en el cuerpo.
2. En 100 años de uso existen solo cinco casos de intoxicación documentados, donde todos sobrevivieron con dosis cientos de veces superiores de lo recomendado en este libro.
3. En caso de respirar aire que contiene una cantidad de gas de dióxido de cloro, puede experimentar irritación de garganta, nariz y pulmones.
4. De manera demasiado concentrada, produce irritaciones en el ojo que son reversibles.
5. Debido a los datos obtenidos hasta la fecha y su uso extenso por más de 100 años, se puede considerar que el dióxido de cloro no produce cáncer, es decir no es carcinógeno.
6. Tampoco existen pruebas de toxicidad dañina en términos de reproducción.
Por el momento en la literatura científica confirmada:
La toxicidad del dióxido de cloro es acertada en el caso de inhalación, que no es lo mismo que la ingestión. En caso de inhalación de aire que contiene una gran cantidad de gas de dióxido de cloro, puede experimentar irritación su garganta, nariz y pulmones. De manera demasiado concentrada produce irritaciones reversibles en los ojos. La ingestión no es considerada tóxica, dependiendo de la dosis. Claro está que sí es tóxica la inhalación del gas, durante una exposición prolongada.
En pruebas con animales una cobaya murió después de estar expuesta 44 minutos a una concentración en el aire de 420 mg por metro cúbico, mientras la misma concentración durante cinco o 15 minutos no fue letal (*Haller and Northgraves 1955), en otro estudio en donde se expuso a cuatro ratones a una cantidad mucho más elevada de 728 mg por metro cúbico, durante dos horas y sólo uno de los cuatro ratones falleció por edema pulmonar (*Dalhamn 1957).
- No existen efectos endocrinológicos, asociados a la ingestión de dióxido de cloro en humanos.
- No existen efectos inmunológicos linfáticos documentados por ingestión de dióxido de cloro en humanos.
- No existen efectos neurológicos asociados por la ingestión de dióxido de cloro en humanos.
- No existen efectos en los aparatos reproductores por la ingestión de dióxido de cloro en humanos.
- No existen efectos donde el cáncer puede ser asociado al dióxido cloro en humanos.
- No existen efectos mutagénicos asociados con el dióxido de cloro en humanos.
- No existen efectos conocidos de acumulación del dióxido de cloro o clorito en humanos.
Sí existen en la literatura casos de intoxicación con el precursor del dióxido, el clorito sódico, que no es de hecho la misma substancia (El carbón tampoco es lo mismo que la pólvora aunque lo contenga !). Existen cinco casos de intoxicación severa documentada con el precursor del dióxido de cloro, que es el clorito sódico de los cuales tres fueron intentos de suicidio fallidos tomando cantidades más de 100 veces por encima de lo expuesto en mi libro, ...ninguno murió.
También se encuentra en internet algún "supuesto" muerto donde sin que haya autopsia concluyente al respecto esto se afirma de manera falaz.
Ni siquiera hay un análisis de sangre donde los niveles de cloro deberían estar por encima de todos los limites posibles.
En términos gastrointestinales hay un caso donde la ingestión de 10 g de clorito sódico(PMID: 8290712) (que es el equivalente a aproximadamente 832 gotas (!) de una solución de clorito sódico al 25% en una sola toma) disuelto en agua en un varón chino de 25 años le causó nausea y vómitos con calambres abdominales con crisis hemolítica en un intento de suicidio frustrado. (*Lin and Lim 1993). Después de tres meses la función renal volvió a ser normal sin dejar daños permanentes.
La toxicidad siempre depende de la cantidad, así que si ingiere una gran cantidad concentrada puede experimentar irritaciones, incluso fuertes, pero los tratamientos realizados por los voluntarios mencionados en este libro no se exponen a cantidades suficientemente grandes como para dañar permanentemente su cuerpo.
(No hay caso mortal documentado científicamente de intoxicación por ingestión de dióxido de cloro en la literatura científica. Probablemente induce vómito mucho antes de llegar a una cantidad crítica posible por ingestión.
Unos estudios sobre efectos hepáticos con humanos, revelaron que la dosis de 34 mg/kg (*Lubbers et al. 1981) no causaron efectos adversos hepáticos.
Se puede considerar una sustancia bastante dócil por una simple razón: ¿De cuántos medicamentos podemos tomar 100 veces la cantidad indicada sin morirnos? …son pocos, ni siquiera se encontraría entre ellos la Aspirina®.